MIGUEL ANGEL NADAL: UNA AGRADABLE SORPRESA I

El debut de Nadal como entrenador del Mallorca ha constituido una sorpresa positiva y no porque dudásemos de su capacidad. Sin embargo, durante todo el tiempo que ha estado con Laudrup como segundo segundo (Larsen también era segundo), no perfilábamos ni veíamos clara su participación en las decisiones tácticas de Laudrup, ni en sus apuestas de juego, ni en sus decisiones tácticas y estratégicas durante el transcurso de los partidos.

Su irrupción y todas y cada una de sus decisiones, denotan y avalan un criterio propio (de ahí nuestra sorpresa) que no ha tenido, prácticamente nunca, ocasión de trasladarse al juego del equipo durante la estancia de Laudrup. Larsen, en mi opinión, ha sido la baza fundamental de apoyo en la gestión deportiva del Mallorca de Laudrup y no Nadal. Estoy seguro.

¿Qué acciones llevó a cabo, de una forma inmediata Nadal, en la apuesta de juego tan diferente a la de Laudrup?

En primer lugar; en la alineación, dejó de probar todo lo que había hecho hasta ahora Laudrup, colocar a Martí, a Joao etc., de laterales ocasionales, e hizo debutar a Bigas del filial. Joven, recio, fuerte, contundente y tácticamente formado. Superó con nota la prueba teniendo en frente a Cejudo, jugador en ascensión y peso en el juego de Osasuna.

En segundo lugar; en la apuesta defensiva. Mientras Laudrup, abría a las bandas a Zuiverloon y Cáceres a emparejarse con los volantes de banda contrarios, Nadal los cerró y juntó con los centrales, dando una solidez defensiva olvidada por el equipo, impidiendo que los dos puntas de Osasuna (Nino y Kike) pudiesen encontrar huecos y espacios entre ellos. Situaciones de juego que ante la Real, Villarreal, Málaga y en toda la segunda vuelta del año pasado se permitieron realizar los rivales del Mallorca.

En tercer lugar; retrasó detrás de la línea del balón a Castro y Emilio y a los dos pivotes, con lo que éstos eran los que realizaban la ayuda en bandas con los volantes contrarios, y Pina y Martí no tenían que bascular mucho y protegían la línea de rechaces y taponaban las líneas de pases interiores a los puntas. Dando equilibrio y solidez a las dos primeras líneas del equipo.

En cuarto lugar;a Victor le encargó la presión en la salida de balón controlada por Osasuna de los movimientos de Raúl García y puso de inicio a Hemed, dando profundidad ofensiva al equipo, que peleó mucho y fijó a los dos centrales rivales.